CAPRICHO #388: Falafel con salsa taratur



El día que hice las bombitas de arepa, a la hora de comer oí la sempiterna cantinela de mis hijos: “¡¡¡¿y eso que llevaaaa?”. “¡¡¡Veneno!!!” – me entraron ganas de decirles, hay que ver lo poco colaboradores que son a veces en cuestiones de probar cosas nuevas pero, bueno, al final resultaron ser un éxito y volaron todas del plato. En pleno almuerzo va mi hijo mayor y me dice: “Pues los falafel están muy buenos”, ¡¡¡arrrrrggggghhhhh, yo lo mato!!! Y seguro que los probó en un bareto chungo del centro… en fin, que pensé: ¿te gustan los falafel?, pues falafel vas a comer y fui rauda y veloz al “internete” a buscar la receta y éste es el resultado:

Los ingredientes necesarios son:

• Medio kilo de garbanzos, puestos en remojo la noche antes

• Cilantro fresco (al gusto de la cocinera)

• Perejil (lo mismo)

• 1 cebolla mediana

• 3 dientes de ajo picados

• 2 cucharaditas de comino molido

• 1 taza de pan rallado

• 1 cucharada de levadura en polvo

• Pimienta negra

• Sal

• Cayena molida (opcional, yo no le puse)

• Sal

• Aceite para freír

Y así lo hice:

Pasé los garbanzos escurridos a un recipiente hondo, junto con la cebolla picada, los ajos, el perejil, el cilantro y una taza de agua. Trituré hasta formar una masa espesa.

 

Añadí la sal, el comino, la pimienta y la levadura. Mezclé bien con la ayuda de una espátula y dejé reposar una media hora. Tras el reposo fui formando bolitas del tamaño de una pelota de ping pong, aunque también se le puede dar forma de minihamburguesa.


 
Por último, las freí en la freidora con abundante aceite caliente y las serví calentitas acompañadas de salsa taratur.

¿Cómo se hace la salsa taratur?

En una sartén sin aceite ni nada de grasa ponemos dos cucharadas soperas colmadas de sésamo y las tosté, moviendo la sartén con movimientos circulares. El olorcillo que desprende es muy agradable. Una vez tostado, pasé el sésamo al mortero con un pelín de agua y lo trituré con la ayuda del mazo hasta hacer una especie de pasta. Añadí el zumo de medio limón, sal y ajo en polvo. Después añadí dos yogures naturales y mezclé todo muy bien. Os aseguro que está riquísima, es más bien mi versión bouganvillera de la genuina salsa taratur, con las cantidades a ojo muy a mi estilo, pero de verdad, no os miento, está deliciosa. Si en vez de yogur utilizamos labán (yogur casero natural) tiene que estar ya “para perder el sentío” y para salsear un showarma ya ni os cuento.


Acompañé todo este rico plato, como no, con pan de pita, ¡genial!


Comentarios

Menudo recetón, a mi marido le encanta esta receta y no se la he hecho nunca siempre la hemos comido fuera jajajajjaa, cuando reuna todos los ingredientes se la hago que le haré muy feliz.
la salsita divina a tu estilo me gusta guapa
un beso
buen finde
JL Gupanla ha dicho que…
mira que bueno, una cosa que no conocía.....y sirve para que los que odiamos las legumbres comamos un buen plato...je, je....De verdad que tienen que gustarme, seguro!!!
Ya te aviso para la próxima paella, con tiempo para que llegues...;)
bsss!!
kesito ha dicho que…
Lupeee, preciosa mía, pero que cosas más capri haces.. ya estoy deseando que llegue mañana para hacerlas y, además, con tu toque salsero que me ha encantao.
Un besote grandote.