CAPRICHO #290: Solomillo de Cerdo relleno de Morcilla de Burgos y Pimientos del Piquillo

La historia de esta receta tiene su aquel. Todo se remonta hace ya casi tres años, al día de la Primera Comunión de mi hijo pequeño. Para festejar algo tan señalado escogimos un pequeño mesón muy cerquita de nuestra casa, llamado “Los Robles de León”, un lugar acogedor y con mucho encanto en el cual ya habíamos estado en alguna ocasión. Tiene página web, os aconsejo que la visitéis; además ha ampliado el local con una zona de tapas que sigue las mismas pautas de exquisitez del salón.

Como éramos poquitos, en el menú que escogimos, cada comensal podía escoger como plato principal entre dos de carne y dos de pescado. Yo, en aquellos momentos, no me encontraba en mi mejor ídem por problemas vesiculares, con lo cual, para no meter la pata, pedí pescado, pero los ojos se me iban detrás del solomillo que se estaba zampando mi amiga Maite. Ella, como es tan apañá, me dió a probar.

Desde entonces andaba con la tarea de catar tan suculento bocado, así que hoy, sin pensármelo ya más, con todos los ingredientes a mano y sana como un roble, he preparado este Solomillo de Cerdo relleno de Morcilla de Burgos y Pimientos del Piquillo.

A la hora de cocinar ha habido un poco de controversia, porque había quien decía que en la receta original iba empanado y frito, pero como la que cocina soy yo, he decidido hacerlo al horno. Así que os muestro cómo lo he hecho. Para empezar, los ingredientes:




Y, esto ha sido la elaboración:


1. He abierto los solomillos (éramos 6 comensales, así que me han hecho falta 2 solomillos aunque en casi todas las fotos salga uno) a lo largo, intentando abrirlo lo más posible.
2. Los he salpimentado.
3. He cortado en rodajitas finas la morcilla y le he quitado la piel.
4. He colocado la morcilla dentro de cada solomillo
5. Y, por último, las tiras de pimiento.


6. He cerrado los solomillos y los he bridado.
7. Los he salpimentado por fuera y los he sellado en una sartén con un poquito de aceite de oliva, para que no perdieran los jugos internos.
8. Los he colocado en una fuente apta para horno (ahí se ven los dos) y los he introducido en el horno, previamente calentado a 210º. Han estado dentro 1 hora, pero eso depende de cada horno.

Cuando vi que estaban hechos, doré un poco con el grill. Una vez listos, los saqué del horno y los corté en rodajas y comencé a emplatar.

Como veis, los he acompañado de puré de patatas y setas salteadas, además de una salsita de piquillos deliciosa que he hecho sofriendo una cebollita francesa bastante apañada de tamaño, después le he añadido un buen puñado de tiras de pimiento que he rehogado un pelín más y, por último, le he añadido 1 brick de 200 ml. de nata He retificado de sal y he dejado reducir. Después he triturado con la batidora (el proceso de la salsa se me ha olvidado fotografiarlo porque ya llevaba varios frentes frente a los fogones).

Huelga decir que yo he disfrutado comiéndolo y creo que los demás también, porque hoy incluso los platos estaban rebañados.

Comentarios

que delicia de receta!!tomo nota...
Chus ha dicho que…
Ese solomillo debe ser muy sabroso, me encanta la idea del relleno. Besos
JL Gupanla ha dicho que…
pues que delicia de solomillo...ya sabes que el solomillo de cerdo es un vicio para mi, es la carne que mas como..!!
Yo diría que al ser un mesón leonés, quizá la morcilla fuese morcilla de león, no de Burgos...que es mucho mas sabrosa.
Pruébalo para la próxima!!
Bsss
Inmaculada ha dicho que…
Que delicia, se ve sabroso ummm...todos los ingredientes que lleva me gustan. BESITOS GUAPA.
Dolores-MiGranDiversion ha dicho que…
Una receta 10, me gustan todos los ingredientes
Besos