Hay muchas maneras de hacer rollitos de pollo, ésta es una de ellas, muy fácil de hacer y con un resultado fantástico: rollitos de pechuga con york y queso.
Para empezar, extiendo unos filetes de pechuga de pollo cortados finitos y los salo. Encima coloco una lonchita de jamón york y otra de queso (da igual, tipo tranchetes, o emmental, o gouda, el que haya). Enrrollo los filetes y los cojo con palillos para que no se desarmen. Los enharino y los frío. Saco y reservo.
En la misma sartén, escurro el aceite que he usado, dejando un poquito, incorporo de nuevo los rollitos y añado un brick de nata, salpimento y dejo que cueza un poco, removiendo para que se vaya haciendo la salsita. ¡Y ya están listos! Hoy los he acompañado de patatas fritas cortadas en dados gordos. Unas setitas salteadas e incorporadas a la salsa quedan de lujo.
(Esta receta es de mi amiga Ana que consiguió que mis hijos probaran la nata por primera vez)
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